El proceso para reciclar metales sigue una serie de fases específicas. A continuación, en este artículo se describen los procesos que, por lo general, se siguen para su correcta ejecución. Sigue leyendo para descubrirlos.
El reciclaje de metales
Las empresas que se encargan de reciclar diferentes tipos de metales como el acero, el aluminio o el cobre, entre otros; siguen una serie de pasos para que el proceso de reciclaje sea óptimo. De este modo, tratan de proporcionar un servicio profesional de calidad y garantizar la futura reutilización.
Proporcionar buenas técnicas y procedimientos hará posible el volver a usar las materias primas. Por tanto, es algo que influye positivamente, tanto a nivel económico como a nivel ecológico.
Fases del reciclaje de metales
Tal y como se ha comentado, el proceso para un buen reciclado de metales comprende los siguientes pasos:
- Recepción de los materiales. Los materiales pueden provenir de diferentes fuentes como empresas, industrias, hogares y otros establecimientos. Normalmente la recogida se realiza con camiones, que facilita su transporte.
- Clasificación y selección. Una vez recogidos, los metales se pesan y se clasifican según su tipo de metal. Los materiales pueden estar mezclados, por lo que es necesario separarlos antes de su procesamiento. Para ello, se utilizan diferentes herramientas, como imanes, cintas transportadoras, separadores magnéticos, entre otros.
- Trituración y compactación. El siguiente paso en el proceso de reciclaje de metales es la trituración y compactación de los materiales. Esta operación tiene como objetivo reducir el tamaño de los materiales para facilitar su manipulación y transporte. En este paso se utilizan diferentes tipos de maquinaria, como trituradoras, prensas y compactadoras.
- Separación de impurezas. Se eliminan los residuos y las impurezas que se encuentran en los materiales, como pinturas, barnices, plásticos, etc. Se pueden utilizar diferentes técnicas como, por ejemplo, la separación por gravedad, la separación magnética.
- Fundición y refinamiento. Se derriten los materiales y se les aplica un tratamiento térmico para eliminar las impurezas que todavía puedan quedar. A continuación, se realiza un proceso de refinamiento para obtener el metal en su estado más puro. Normalmente, lo llevan a cabo empresas de fundición.
Como resultado, el metal reciclado se utiliza para fabricar nuevos productos. El proceso de fabricación varía según el tipo de metal y el producto final que se desea obtener. En GyA somos conscientes de la importancia del reciclaje. Por ello tenemos en cuenta todos los pasos con tal de conseguir buenos resultados.
Gracias a la gestión de chatarra, se reduce la cantidad de residuos que se generan y se contribuye a la conservación del medio ambiente. Además, se trata de una actividad económica importante, ya que permite la creación de empleo y la generación de ingresos para las empresas que se dedican a esta actividad.
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